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¿Cómo recurrir una multa de alcoholemia? | Guía 2024

¿Te han puesto una multa por alcoholemia y quieres recurrirla?

Te contamos lo que dice la ley sobre este delito contra la seguridad vial y cuáles son las vías que tiene el multado para poder recurrir la sanción.

Además, podrás contactar sin compromiso con abogados expertos en alcoholemia de tu ciudad, quienes te asesorarán sobre las mejores estrategias de defensa.

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¿Qué se considera delito por alcoholemia?

En el marco legal español, la conducción bajo los efectos del alcohol no es un asunto menor.

La legislación es clara y estricta en cuanto a los límites permitidos de alcohol en sangre y aire espirado, estableciendo consecuencias severas para quienes los sobrepasan.

Según el Código Penal y la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, la infracción por alcoholemia puede escalar a delito, dependiendo de la concentración de alcohol detectada en el organismo del conductor.

¿Qué tipo de sanciones pueden llevarse a cabo?

La ley distingue entre sanciones administrativas y penales. Administrativamente, se establece un límite de 0,25 miligramos de alcohol por litro en aire espirado (0,5 gramos por litro en sangre) para la mayoría de los conductores.

Superar estos valores conlleva multas económicas que varían entre 500 y 1.000 euros y la retirada de puntos del carnet de conducir, siendo más severas en casos de reincidencia o tasas más altas.

Por otro lado, el Código Penal se hace cargo cuando la tasa supera los 0,60 miligramos por litro en aire espirado, categorizando la conducta como un delito contra la seguridad vial.

Las penas para estos casos pueden incluir prisión de tres a seis meses, multas de seis a doce meses, trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y la privación del derecho a conducir por un tiempo que oscila entre uno y cuatro años.

¿Cómo recurrir una multa por alcoholemia?

Recurrir una multa por alcoholemia no es un proceso directo; requiere de un entendimiento de las vías administrativas y legales disponibles.

Tras recibir una notificación de sanción, el conductor tiene un plazo de 20 días hábiles para presentar alegaciones ante la administración.

Es fundamental, en este punto, el asesoramiento de un abogado especializado que pueda evaluar la validez de la sanción y orientar sobre la estrategia de defensa más adecuada.

La apelación puede basarse en varios aspectos: desde errores formales en la notificación de la multa, pasando por deficiencias técnicas en la calibración del etilómetro, hasta la incorrecta administración de las pruebas de detección.

Otro argumento frecuente es la violación del derecho a una doble prueba para confirmar el resultado o la falta de información al conductor sobre su derecho a solicitar un análisis de sangre o de orina como contraste.

Si las alegaciones no son atendidas favorablemente, existe la opción de elevar el recurso a la vía contencioso-administrativa, donde un juez revisará el caso. Este paso requiere de una preparación meticulosa del caso, incluyendo la recopilación de pruebas, testimonios y, en ocasiones, informes periciales que respalden la posición del conductor.

En este proceso, la elección del momento para actuar y la calidad del asesoramiento legal son determinantes.

Un recurso bien fundamentado puede no solo evitar la sanción inicial sino también sentar precedentes para casos futuros. 

Estrategias de defensa

Al enfrentarse a una multa por alcoholemia, el recurso no es la única vía disponible.

Existen diversas estrategias de defensa que pueden emplearse para cuestionar la validez de la sanción o mitigar sus efectos.

Estas estrategias requieren de un análisis detallado del caso:

Cuestionamiento de la prueba de alcoholemia

Una de las líneas de defensa más comunes implica cuestionar la fiabilidad de la prueba de alcoholemia.

Esto puede incluir la calibración y mantenimiento del etilómetro utilizado para la medición.

Los registros de mantenimiento y calibración del dispositivo pueden ser solicitados para asegurar que el equipo estaba en condiciones óptimas durante la prueba.

La falta de precisión o irregularidades en el mantenimiento pueden ser bases sólidas para impugnar los resultados.

Derecho a una segunda prueba

La legislación ofrece el derecho a una segunda prueba si los resultados de la primera son cercanos al límite legal o superiores a este.

Argumentar que no se ofreció adecuadamente la oportunidad para una doble verificación o que el intervalo de tiempo entre ambas pruebas no fue el adecuado puede ser fundamental.

Esta estrategia se enfoca en la posibilidad de que la concentración de alcohol disminuya naturalmente entre una prueba y otra, potencialmente colocando al conductor por debajo del límite legal en la segunda medición.

Procedimientos incorrectos

Otro punto de defensa se centra en los procedimientos seguidos por las autoridades en el momento de la detención y prueba.

Esto puede incluir desde la falta de información sobre los derechos del conductor, hasta errores en la forma en que se administró la prueba de alcoholemia.

La ley estipula protocolos específicos que deben ser seguidos para garantizar la validez de las pruebas, y cualquier desviación de estos protocolos puede ser motivo de impugnación.

Situaciones médicas especiales

En algunos casos, condiciones médicas particulares pueden influir en los resultados de la prueba de alcoholemia.

Por ejemplo, ciertas condiciones médicas o la ingestión de medicamentos específicos pueden provocar un resultado falso positivo en la prueba de alcoholemia.

Presentar pruebas médicas que respalden esta circunstancia puede ser una estrategia viable, aunque compleja, que requiere de documentación detallada y, posiblemente, testimonios de expertos médicos.

Errores en la notificación de la multa

Finalmente, revisar minuciosamente la notificación de la multa en busca de errores formales o de procedimiento puede revelar vías de defensa.

Esto incluye desde errores en los datos personales del conductor, hasta la falta de detalles específicos sobre la infracción o la omisión de información crucial que debe ser comunicada al conductor al momento de la sanción.

¿Cómo encontrar un abogado para recurrir una multa de alcoholemia?

Si deseas consultar con un abogado especialista, te invitamos a rellenar el formulario disponible en esta misma página en la que te encuentras ahora.

Tras ello, tu petición se enviará a Melendos, una plataforma legal de confianza que conecta a personas como tú con abogados, permitiéndote obtener presupuestos de hasta tres abogados especializados.

Todo ello con la comodidad de gestionarlo desde tu hogar y la seguridad de estar en contacto con abogados de primer nivel.

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